Esta foto pertenece a la bonita inflorescencia de la Sansevieria javanica (os la presenté el otro día), y como podéis apreciar en ella, presenta en la parte inferior de cada flor una gotita de rico néctar. Esta segregación de néctar fuera de la flor (mediante nectarios extraflorales) se debe a una adaptación de la planta para favorecer su "futuro" y maximizar su "descendencia". Esta sustancia dulce y rica en proteínas le sirve para aliarse con las hormigas, las cuales, encantadas con tal manjar, protegerán de "depredadores" a las flores, evitando que insectos como mariposas u otros parásitos pongan sus huevos o se las coman. Otra función importante es la de evitar, ya conformes con esa recompensa, que éstas roben el néctar floral destinado al polinizador.
Esta interacción entre planta y hormiga es una solución ingeniosa a un problema de "reproducción" (si se comen la flor...) y no es más que otra muestra de la "inteligencia" de las plantas.
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